5Jun

Entrega de la V edición del Premio Novia Salcedo a la Excelencia en la Integración Profesional de los Jóvenes

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Una vez más los Premios Novia Salcedo a la Excelencia en la Integración Profesional de los Jóvenes premian a quienes se arriesgan a romper moldes, a abrir nuevos horizontes y terminar definitivamente con el viejo paradigma.

Desde una mirada atenta puedo distinguir que detrás de cada premiado hay una persona con valentía y con valores para afrontar los retos de una sociedad que se tambalea.  Son personas al frente de negocios que trasmiten fortaleza y sobre todo que no han olvidado ninguno de las máximas que deben suponer una buena praxis.

Y es en las buenas praxis donde las empresas galardonadas en sus diversas categorías: Pequeña Empresa, Sociedad Pública e Instituciones, así como Categoría Personas, han hecho  verdadero hincapié en la necesidad de acompañar siempre a su actividad laboral los rasgos más humanos y comprometidos para fomentar el empleo.

Ejemplo de ello es La fundación Paideia a través de Rosalía Mera Goyenechea con una vocación interdisciplinar y pluridimensional que abarca Investigación y Formación.  Su huella  personal a favor de la integración e inserción social y laboral de jóvenes con discapacidades física y psíquica y su fomento de la solidaridad y el aprendizaje social es lo que ha merecido este galardón.

También en el caso de EVERISINITIHOBE, sus sólidas trayectorias en los buenos resultados obtenidos en la integración profesional de jóvenes  basada en la captación de talento altamente cualificado es una clara recompensa convirtiéndose en importantes elementos tractores para la creación de empresas y la sostenibilidad.

Desde una perspectiva innovadora, la Young Foundation (ONG)se atreve a contar con una vertiente formadora que abarca la empleabilidad de jóvenes cualificados y la creación de líderes con talento.

Y por último, por su profundo compromiso con el fomento de los valores de ética, responsabilidad social y tolerancia en los jóvenes, Miguel de la Quadra Salcedo por haber valorado e impulsado sobretodo  la multiculturalidad.

Trasladar todos estos conceptos éticos que puedan seguir imprimiendo un nuevo sentido a la comunidad y al bien común sería lo que una empresa de “capital humano” debería tener siempre en cuenta como primera y última lección de vida laboral.  ¡quien sabe si el año que viene Fondo Formación Euskadi  se encuentre entre los premiados!

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