15Nov

Día Solidario de las Empresas

diaepsoliEl pasado 15 de Octubre se celebro el El Día Solidario de las Empresas (DSE)-Empresa Ecosolidarias 2011.

El Día Solidario de las Empresas (DSE) es una actividad en la que un grupo de trabajadores/as de empresas participa en un proyecto con una ONG a través de la figura del voluntariado empresarial. En Fondo Formación Euskadi nos animamos a participar en esa jornada 8 compañeros/as.

Esta participación requería madrugar en un sábado y eso es algo que, de partida cuesta porque el cuerpo y la cabeza nos dicen que los días de descanso no son para madrugar. Pero Helios quiso regalarnos un día espectacular de luz, calor y conversaciones varias.
La jornada empezó a las 8:30 en la playa de la Arena de Muskiz. Curiosamente, ninguno de los voluntarios llego con retraso. Y quiero incidir en lo de curiosamente. A una actividad de carácter voluntaria, a unas horas que podemos considerar intempestivas, llegamos con una puntualidad exquisita. Esto da que pensar, ¿no? El café con leche nos calentó el cuerpo y nos espabiló para la tarea que nos esperaba por delante.

A las 9:30 nos reunimos todas las personas voluntarias en el punto de encuentro. Unos nos mirábamos a los otros para ver qué era lo que nos diferenciaba, empresarialmente hablando. A algunos grupos se les identificaba porque llevaban un atuendo específico para ello, muy vistoso, muy lúcido y con mucho marketing empresarial. La empresa había hecho una inversión económica y tenía que producir la rentabilidad oportuna. Nosotros llevamos una identificación con una txartela de FFE colgada al cuello pero el atuendo era el que cada uno había encontrado a oscuras en el armario, de madrugada. Y el resto no llevaba identificación empresarial, solo personal. Había un grupo de voluntarios que se les veía en la cara que su vida no había sido un camino de rosas precisamente, pero allí estaban dispuestos a colaborar y participar como el que más. Eran de una asociación que lucha contra la exclusión social. No representan a ningún proyecto empresarial. Su proyecto empresarial eran ellos mismos.

La mañana transcurrió haciendo la labor para la que nos habíamos ofrecido: quitar malas hierbas de las dunas de la playa. Estas hierbas son malas porque son invasoras e invaden el espacio que le corresponde a otras especies en las dunas, degradándolas y haciendo que corran riesgo de desaparición.

El trabajo que teníamos que hacer no requería un gran esfuerzo y además era voluntario. Pudimos constatar que era tan voluntario que un grupo bien dotado en cuanto a elementos de marketing que les distinguían perfectamente del resto, no la «hincaron» en toda la mañana salvo a la hora del refrigerio. La sensación que generaron fue la de que «que morro tienen» y «ya les vale» pero nadie les dijo nada porque la voluntad no se exige. Me imagino que en su empresa manifestarán más voluntad porque si no, están condenados al fracaso. Y me pregunto si serán «plantas invasoras» dentro de su propia empresa, no dejando que las plantas que deben crecer y desarrollarse lo puedan hacer quitando el agua y los nutrientes necesarios.

Esto de las plantas invasoras da mucho juego. La idea es conseguir un ecosistema que se mantenga por sí mismo, libre de elementos que la dañen y la pongan en riesgo de extinción. Las organizaciones empresariales tienen que conseguir su ecosistema que les permita vivir, regenerarse y avanzar en el espacio donde se desarrollan. Deben detectar en todo momento las plantas invasoras que roban agua y nutrientes provocando pérdidas de tiempo innecesario, esfuerzos que se hacen sin un objetivo claro, conversaciones de pasillo que, a veces, sirven para restar en vez de sumar, esa sensación de no tener toda la información necesaria para realizar un trabajo porque alguien se la guarda, etc.

Una vez realizado «el trabajo» nos hicimos unas fotos de grupo para demostrar que estuvimos allí. Después de un «pote» con aceitunas cerramos la jornada con una comida humilde en un frontón de Muskiz donde nos agradecieron nuestra colaboración y buena disposición.
El espíritu Fondo nos dirigió de nuevo hacia la playa de la Arena y disfrutamos de una tarde de sol en terraza con conversaciones que se alargaron hasta que anocheció. Y encima nos sobre «bote».

Al final de la jornada, quiero mencionar algunas conclusiones que se pueden extraer de este tipo de iniciativas:
1. Es más gratificante dar que recibir. El hecho de sentirte útil realizando una labor es una sensación muy agradable.
2. El trabajo en equipo da sus resultados. Con el esfuerzo de todos los que colaboramos conseguimos un resultado satisfactorio.
3. Cuando se está haciendo un trabajo con ganas y motivación los resultados son muy positivos.

Una reflexión para finalizar. ¿Podríamos sacar este tipo de conclusiones después de nuestra jornada laboral?

Etiquetas: Día Solidario, personas, RSE, Voluntariado Empresarial

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