En una charla sobre RSE en el ámbito empresarial, un invitado aducía que en su opinión había muchas cosas que se metían en el saco de la RSE y que él consideraba que no eran tales.. Su discurso se sustentaba en que la sociedad en la que vivimos, la del siglo XXI, tiene asumidos ya una serie de valores que le corresponden de manera implícita. Se entiende, se considera, se supone, que vivimos en una sociedad civilizada y educada en los valores más nobles que enaltecen el orgullo del ser humano. Por lo tanto somos una sociedad conformada por hombres y mujeres responsables, solidarias, empáticos, que respetamos a nuestro semejantes, que asomos sinceros con nosotros mismos y con los demás y muy comprometidos con nuestros ideales y valores.
La respuesta de otro de los invitados no se hizo esperar. Su argumentación fue la siguiente: «Sí somos responsables, ¿por qué nos cuesta aceptar las responsabilidad que nos corresponden en nuestros trabajo? Si somos solidarios, ¿por qué tenemos una sociedad con casi 5 millones de parados y no se reparte el trabajo solidariamente? Si somos empáticos, ¿por qué no somos capaces de ponernos en la piel de nuestros compañeros/as de trabajo y no entendemos ni aceptamos otras posturas diferentes de las nuestras propias? Si somos….»
Esta respuesta dio pie a un debate muy interesante sobre cómo se está utilizando y administrando el concepto de la RSE en el ámbito empresarial. Había representantes institucionales, sociales, y empresariales, banca incluida, por lo que las opiniones fueron muy diversas, dependiendo de las experiencias propias. Al final se extrajeron una serie de conclusiones que se resumen en las siguientes.
La RSE que se utiliza en el mundo empresarial tiene muchas definiciones y diversos contenidos porque es una materia decarácter voluntario y no hay una exigencia sobre lo que debe incluir en la RSE y lo que no. Lo que sí es común a todas las empresas, es que cada una tiene que buscar su modelo para que tenga un sentido y se pueda llevar a cabo su propia acción de RSE. Una PYME no puede aspirar a tener un modelo de RSE de una multinacional, ni al revés. Los compromisos que pueden adquirir unas y otras van a ser muy diferente calado. Lo razonable es buscar el equilibrio donde se llegue a articular unos compromisos que puedan ser exigidos y demandados por los grupos de interés, siempre desde el sentido común y lacoherencia. Una de las posibles maneras de lograrlo es utilizando valores que deben estar presente en las accione de RSE, como la responsabilidad, la solidaridad y la empatía.
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